martes, 27 de octubre de 2020

Trick or Treat: alfiletero

¡Hola a todos! De nuevo es martes y acabo de darme cuenta de lo rápido que pasa el tiempo, dentro de poco celebraremos el Día de Todos los Santos o Halloween. La verdad es que esta festividad me gusta mucho y este año he querido celebrarla con un proyecto que aunque sencillo me parece muy bonito.


Como podéis ver en las fotos se trata de un alfiletero, muy original, que se aparta de las tradicionales calabazas, que tanto me gustan y que os he mostrado en más de una ocasión. 


Pero este año me apetecía hacer algo diferente, así que cuando me tropecé  por casualidad con estas botas de bruja, tan especiales, no me pude resistir a su influjo. Así que no tuve más remedio que ponerme manos a la obra y hacer este bonito alfiletero, que hoy os traigo y que espero os guste. 


No sé a vosotros pero a mí me encanta el contraste que ofrece el naranja con el negro, es una combinación que funciona muy bien, y que me recuerda especialmente a esta festividad. El negro y el naranja es para Halloween, lo que es el verde y el rojo para la Navidad. 


Para  la trasera escogí una llamativa tela naranja con un diseño geométrico, que creo que le va muy bien, y que ya he utilizado en otros proyectos de este tipo, os dejo el enlace por si os apetece echar un vistazo.  


Y con esta idea voy acabando el post de esta semana. Espero que os haya gustado, yo por mi parte estoy encantada de estar compartiendo con todos vosotros una semana más. Hasta pronto y nos vemos en la próxima entrada. Os deseo que paséis una feliz Halloween.

martes, 20 de octubre de 2020

Truco de costura: ampliar un bloque

¡Hola a todos! Este martes quiero compartir con todos vosotros un pequeño truco de costura, que espero os guste y os pueda servir de utilidad. Resulta que hace unas semanas andaba yo con la intención de reutilizar un bloque para un proyecto que llevo entre manos, que espero no tardar mucho en mostraros, aunque conmigo nunca se sabe, pero ese es otro tema, que me desvío.


Lo cierto y verdadero es que mi bloque era demasiado pequeño y necesitaba crecerlo para que tuviera el mismo tamaño que otro que tenía guardado y que también quiero usar. ¿Cómo hacerlo? pues si os interesa saberlo os lo cuento a continuación. 

Lo primero será tomar medidas para saber en cuanto necesitamos crecer el bloque. Os pongo un ejemplo, que será más sencillo: suponed que vuestro bloque mide 22 centímetros y necesitáis que mida 28 cm, por lo tanto la diferencia entre ambos, es de seis centímetros.


Ahora toca hacer uso de las matemáticas, esa diferencia de seis centímetros la dividimos por dos, el resultado es de tres centímetros a lo que hay que añadir el margen de costura; suponed que fuera de medio centímetro; el resultado sería de 3,5 centímetros.

Hechos los cálculos, toca cortar una tira de tela con este ancho de medida, lo suficientemente larga como para rodear el perímetro del bloque. Si es necesario se puede unir varias, como es lógico.


Ahora nos toca coser la tira, que hace las veces de marco, al borde del bloque. Colocamos alfileres y cosemos. Fijaos en las fotos. 



Como podéis ver nos sobra tela en la esquina del bloque. Lo que tenemos que hacer es cuadrarla con la ayuda de la regla y el cúter. En la foto la idea queda mucho más clara.



Con esto ya tenemos cosido uno de los lados de nuestro marco. Ahora volvemos a repetir el proceso, colocamos de nuevo la tira de tela, sujetamos con alfileres y volvemos a coser. Fijaros en las fotos, que una imagen vale más que mil palabras.



La mecánica va a ser siempre la misma, vamos cosiendo lado a lado hasta rodear por completo el borde de nuestro bloque. Es importante que conforme vayáis cosiendo planchéis las costuras. El resultado será mejor y más exacto.


Y colorín colorao este mini-tutorial se ha acabado. No me digáis que no ha quedado bonito. Nadie diría que es un "apaño". Y  con esto me despido. Espero que os haya servido de ayuda y de inspiración. Hasta pronto y nos vemos la semana que viene. No me faltéis. Besotes.

martes, 13 de octubre de 2020

Otra idea para reciclar botes de cristal: ahora con ganchillo

¡Hola a todos! Este martes, como os prometí la semana pasada os traigo, otra idea para reciclar botes de cristal, pero esta vez con algo hecho por nosotros mismos, como son estos pequeños y adorables corazones de ganchillo o crochet.




Ya sabéis, que aunque hago mis pinitos con el ganchillo, no es mi especialidad, sin embargo estos corazones son muy sencillos, y si le coges el truquillo, puedes hacer un montón de ellos en apenas un rato, y aprovechar, que nunca viene mal, esos restos de lana que van quedando de otras labores. Éstos, los hice en una tarde tranquila, de ésas en que puedes dedicarte a disfrutar de lo que más te gusta.





El corazón está pegado al cristal, como no podía ser de otro modo, con mi muy querida pistola de pegamento caliente. Los otros los tengo guardados en espera de otros proyectos, aunque todavía no tengo ninguna idea en mente. Si se os ocurre algo, estoy abierta a sugerencias. 



En este caso, como en los frascos de la semana pasada, también he recurrido al cáñamo para ocultar la rosca.  Este material  me encanta, no sólo por su textura sino por ese aspecto que tiene, entre rústico y orgánico, que le da a los proyectos un toque muy especial. Creo que queda claro que me chifla aunque como es lógico se puede usar cualquier otro material, ya sabéis  lo que dicen, la imaginación no tiene límites y siempre es divertido e interesante probar cosas nuevas.



Si os ha gustado la idea y queréis ponerla en práctica os dejo escritas las instrucciones para hacer este sencillo pero precioso corazón:




Paso a paso:

  1) Un  anillo mágico corredizo.
  2) 3 cadenetas.
  3) Pinchando en el interior del anillo mágico hacer 3 puntos altos dobles (p.a.d)
  4) 3 puntos altos (3 p.a.)
  5) 1 cadeneta
  6) 1 punto alto doble (1 p.a.d)

Cuando lleguemos a este punto tendremos la mitad del corazón. Ahora hay que hacer la otra mitad de modo inverso, como el reflejo de un espejo.

  7) 1 cadeneta
  8) 3 puntos altos (3 p.a.)
  9) 3 puntos altos dobles (3 p.a.d)
10) 3 cadenetas
11) 1 punto deslizado en el anillo central
12) Tirar del hilo para cerrar el hueco central del anillo.


Estas son las instrucciones simplificadas, a modo de esquema, que es el que mejor me funciona a mí pero si preferís algo más visual en youtube hay muchos tutoriales. Os dejo el enlace al que he seguido, es del canal  Ahumaya crochet, y está maravillosamente explicado. Y con esto me despido espero que la entrada os haya gustado y que os sirva de inspiración para vuestros propios proyectos. Hasta pronto y nos vemos en el próximo post. No me faltéis. Un besote muy grande.


martes, 6 de octubre de 2020

Reciclar botes de cristal: tres ideas

¡Hola a todos! Este martes os traigo un post un tanto distinto de lo que normalmente os suelo mostrar, pero es sin duda una idea que llevaba rondando por mi cabeza mucho tiempo y que me ha costado materializar, pero nunca es tarde, ya sabéis lo que dice el dicho. 


Muchas veces os he comentado lo mucho que me gusta reciclar las cosas, lo que quizás desconocéis es mi pasión por los frascos de cristal. Tengo una especie de fijación con ellos, porque me gustan todos hasta los más corrientes, si tuviera espacio creo que no me desharía de ninguno, porque a todos les veo posibilidades.


Si os pasa como a mí y os encanta el reciclaje y sobre todo los frascos de cristal este post os va a encantar porque os traigo tres propuestas muy sencillitas, sólo necesitáis una pistola de pegamento caliente, algo de cáñamo y una buena dosis de imaginación.


La primera de ellas es quizás la más romántica de las tres, como podéis ver en las fotos he decorado un pequeño frasco de conserva con una puntilla en color beige, que también es reciclada. Para ocultar la rosca del frasco he pegado una cuerda estrechita de cáñamo con un poco de pegamento caliente. Es una solución muy sencilla pero sin duda resultona, tanto que la he repetido en los tres casos. No me digáis que no luce precioso el frasquito sobre mi escritorio.


La siguiente propuesta tiene un marcado carácter marinero, se trata de una pequeña estrella de mar en color morado, a la que le tengo mucho cariño porque fue un regalo de mi hija. La tenía un tanto olvidada y ahora ha recobrado el lugar que se merecía.


Y por último llego a la tercera propuesta, que de nuevo tiene un aire muy marinero. Se trata de un viejo adorno de jarrón, que lleva tanto tiempo conmigo que ni siquiera recuerdo donde lo compré,  y que como la estrella vuelve a lucir con todo su esplendor.


Para fijar todos estos elementos me he valido de una pistola de pegamento caliente. Me ha sorprendido lo fácil que ha resultado pegarlo todo, además de la buena sujeción que se consigue con este tipo de pegamento. Qué os puedo decir, me tiene enamorada. Creo que definitivamente no va a volver a la caja de herramientas de mi marido.

Y con esto despido este post, si el tema del reciclaje os gusta y también el ganchillo no me faltéis el martes que viene. Hasta pronto y nos vemos en la próxima entrada. Un besote muy grande.